La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de EEUU (CPSC) ha emitido una norma final que establece estándares de seguridad obligatorios para los cojines de apoyo para bebés. Además, ha modificado su reglamento con respecto a los organismos de evaluación de conformidad de terceros para incluir el nuevo estándar de seguridad en la lista de avisos de requisitos, junto con la identificación de los cojines de apoyo para bebés como un producto duradero para bebés o niños pequeños sujeto a los requisitos de registro en vigor para ciertos productos de consumo. Los nuevos requisitos se aplicarán a partir del próximo 5 de mayo.
Los cojines de apoyo para bebés son productos que sostienen a un bebé para que se relaje, es decir, para que esté reclinado en posición supina, prona o reclinada. Este tipo de productos pueden tener o no paredes laterales perimetrales. La mayoría de los cojines de apoyo para bebés que se encuentran actualmente en el mercado estadounidense están rellenos de espuma mullida o de guata fibrosa suave y están cubiertos por una tela flexible. Algunos cojines de apoyo para bebés se comercializan para su uso en una cuna o en otro producto para dormir para bebés a pesar de las advertencias de la CPSC y de otras entidades (tales como la Academia Estadounidense de Pediatría) de que no se deben colocar objetos blandos como almohadas y ropa de cama sobrante en el entorno de sueño de un bebé.
Una lista no exhaustiva de ejemplos de cojines de apoyo para bebés incluye almohadas posicionadoras de cabeza; tumbonas planas para bebés; almohadas de cuna; almohadas de cuña para bebés; posicionadores para dormir para bebés, a menos que estén regulados como dispositivos médicos por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU (FDA); juguetes de peluche comercializados para su uso como un cojín de apoyo para bebés; almohadas para bebés para el tiempo boca abajo del bebé o para descansar, ya sean planas o inclinadas; almohadas multiuso comercializadas tanto para amamantar como para descansar; almohadas antivuelco con o sin correas que sujetan la almohada al bebé; almohadas para que los bebés se alimenten solos que sostienen un biberón frente a la cara de un bebé reclinado o acostado; almohadillas y colchonetas; y almohadas complementarias y otros accesorios acolchados a menudo comercializados para su uso con un asiento de automóvil, un cochecito o una hamaca para bebés pero que no se venden con ese producto y, por lo tanto, no están incluidos en la norma de seguridad obligatoria para esos productos. Estos productos cubiertos deben cumplir con los requisitos de la nueva regla. Sin embargo, para evitar obligaciones potencialmente duplicadas o conflictivas, el alcance de la nueva regla no incluye productos duraderos para bebés que ya están regulados por la CPSC e incluidos en la lista de productos bajo la disposición regulatoria 16 CFR 1130.2(a).
La CPSC advierte que los siguientes productos no son cojines de apoyo para bebés cubiertos por la nueva norma: (1) almohadas que no se comercialicen, no están diseñadas ni estén destinadas para ser utilizadas por bebés, tales como almohadas para la cama y almohadas decorativas para adultos; (2) almohadas de lactancia si están sujetas a la norma de la CPSC para almohadas de lactancia, a menos que también se comercialicen para descansar; (3) colchones para cunas y corrales regulados por la norma para corrales y la norma para colchones de cuna; (4) almohadas de guardería puramente decorativas, como las personalizadas con el nombre y la fecha de nacimiento de un bebé, que no se comercialicen, no estén diseñadas ni estén destinadas para ser utilizadas por bebés; (5) juguetes de peluche, a menos que cumplan con la definición de un cojín de apoyo para bebés; (6) revestimientos acolchados para asientos que se vendan con una mecedora, cochecito, asiento de coche, portabebés, columpio, trona o hamaca y que estén diseñados específicamente para adaptarse a ese producto; (7) revestimientos acolchados para asientos e insertos para una mecedora, cochecito, asiento de coche, portabebés, columpio, trona o hamaca que se vendan por separado por el fabricante como pieza de repuesto y estén diseñados específicamente para adaptarse a ese producto; y (8) alojamientos para dormir regulados por la norma de productos para el sueño de bebés de la CPSC bajo la disposición regulatoria 16 CFR 1236.
La norma final aborda el riesgo de muerte y lesiones asociadas con los cojines de apoyo para bebés debido principalmente a los peligros de asfixia, atrapamiento y caída. Aborda los peligros de asfixia posicional al exigir que todas las superficies sean lo suficientemente firmes como para que sea poco probable que se adapten a la cara de un bebé y obstruyan sus vías respiratorias y al establecer un ángulo de inclinación máximo que evitaría la colocación peligrosa de la cabeza y el cuello de un bebé a lo largo de las superficies del producto. También establece un requisito de ángulo lateral que aborda el riesgo de atrapamiento entre la pared lateral y la superficie de apoyo del ocupante. Aborda los peligros de caídas limitando eficazmente la altura de la pared lateral para disuadir a los cuidadores de creer erróneamente que estos productos son seguros para los bebés sin supervisión. Por último, exige una etiqueta de advertencia en el producto con un texto contundente, visible y permanente.
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