USTR anunció recientemente su tan esperada revisión de los aranceles de la Sección 301 sobre los productos chinos incluidos en las Listas 1 y 2, que actualmente tienen fechas de caducidad del 6 de julio (Lista 1) y 23 de agosto (Lista 2). USTR aceptará solicitudes en las próximas semanas para continuar estos aranceles, las cuales pueden ser presentadas por representantes de las industrias nacionales que se beneficien de ellos. Los plazos para presentar dichas solicitudes son desde el 7 de mayo hasta el 5 de julio, en el caso de los productos incluidos en la Lista 1, y entre el 24 de junio y el 22 de agosto, en el caso de los productos incluidos en la Lista 2. USTR indicó que también considerará la continuación de los aranceles sobre los productos chinos incluidos en las Listas 3 y 4A “según corresponda” a las acciones de las Listas 1 y 2, pero no dio más detalles.
Si USTR recibe una solicitud de continuación, anunciará ese hecho y extenderá la vigencia de los aranceles. A partir de ese momento, USTR iniciará un examen separado en el que aceptará comentarios de cualquier persona interesada sobre cuestiones como la eficacia de los aranceles para lograr los objetivos de la Sección 301, otras medidas que podrían adoptarse, y los efectos de los aranceles sobre la economía de EEUU, incluidos los consumidores. Sin embargo, dicho informe no influenciará directamente la decisión de mantener o no los aranceles una vez se cumplan los cuatro años de vigencia.
Un día antes de este anuncio, la representante comercial Tai dijo que la modificación de los aranceles de la Sección 301 sobre las importaciones de China son una posibilidad como parte de un esfuerzo más amplio para combatir la creciente inflación en EEUU.
En un evento celebrado el 2 de mayo en California, Tai dijo que “todas las herramientas están sobre la mesa”, incluidos los aranceles, mientras se considera cómo abordar el aumento de los precios. Tai se ha resistido a la idea de reducir los aranceles sobre los productos chinos, ya que según ella estos aranceles aumentan la influencia de EEUU en las negociaciones sobre irritantes comerciales con Beijing. Sin embargo, altos funcionarios de la administración Biden han comenzado a plantear esta idea con más frecuencia en las últimas semanas, y los comentarios de Tai podrían indicar una flexibilización de su posición. Dicho esto, Tai recalcó en sus comentarios la necesidad de garantizar que “lo que sea que hagamos en este momento [con respecto a los aranceles] ... no socave el diseño y la estrategia a mediano plazo que sabemos que debemos seguir” con respecto a las relaciones comerciales entre EEUU y China.
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