Más de dos años desde que expiraran las exenciones arancelarias bajo el Sistema Generalizado de Preferencias (SGP / GSP), un grupo bipartidista de decenas de legisladores está presionando nuevamente a los líderes congresuales para que avancen el proceso de reautorización del programa.
El SGP, un programa que brinda trato libre de arancel a las importaciones de miles de productos de más de 100 países en vías de desarrollo, expiró el pasado 31 de diciembre de 2020, lo que significa que los bienes elegibles han estado sujetos a aranceles en EEUU desde entonces. El Congreso debe actuar para que el programa sea reautorizado pero los legisladores no lo han hecho en medio de desacuerdos sobre si reformar el SGP y en qué medida. Si bien el programa generalmente disfruta de apoyo bipartidista, algunos legisladores han presionado para que se realicen cambios como la revisión de los requisitos de elegibilidad para reflejar preocupaciones relacionadas con los derechos humanos y el medio ambiente, además de en otras áreas; agregar o eliminar países beneficiarios; y alterar la lista de productos cubiertos.
En una carta con fecha del 11 de julio a los líderes de la mayoría y la minoría del Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara, decenas de miembros de la Cámara enfatizaron que renovar el SGP podría ayudar a reducir la dependencia estadounidense de China, que es un objetivo político compartido por muchos en todo el espectro político. La carta indica que, si bien China nunca ha sido elegible para beneficiarse del SGP, muchos de sus competidores sí lo son. Según los legisladores, el SGP genera un ahorro arancelario promedio de un cinco por ciento en todos los productos y este ahorro puede llegar hasta un 20 por ciento. Casi todos los productos elegibles para el SGP también están sujetos a los aranceles de la Sección 301 cuando se importan de China, según los legisladores, lo que significa que el programa “puede proporcionar ventajas arancelarias de hasta un 45 por ciento para productos clave en comparación con China.”
Por el contrario, señala la carta, el prolongado lapso del SGP beneficia a China a expensas de los países beneficiarios, que han visto US$2.5 billones en aranceles adicionales sobre sus US$45 billones en exportaciones a EEUU en los últimos años. Como resultado, las empresas estadounidenses que redujeron sus importaciones de China en respuesta a los aranceles de la Sección 301, que es precisamente la acción que el Congreso busca alentar, están considerando regresar a ese país debido a los costos más altos de importar bienes de los competidores de China asociados con la expiración del SGP.
Por lo tanto, los legisladores pidieron a los líderes del Congreso que actúen “lo más rápido posible” para aprobar la legislación para renovar el SGP, afirmando que una medida que incluya “cambios inteligentes para hacer que los países del SGP sean alternativas más viables” a China disfrutaría de un amplio apoyo bipartidista.
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